Las Ramblas Marplatenses
La primitiva rambla de madera fue construida en 1888, constituida por numerosas casillas de madera unidas por una plataforma del mismo material. Esta rambla fue destruida en 1890 por un temporal.
Posteriormente, se levanta la construcción de una nueva, llamada Carlos Pellegrini, en honor a su propulsor, que fuera destruida en un gran incendio en 1905. A continuación y por encargo de José Lavalle, se levanta la tercer rambla que lleva su nombre. En esta tercer rambla las casillas tendían a ser más opulentas y existían lujosos salones donde se daban las reuniones sociales a la hora de la playa.
A partir de esta fecha las costumbres de uso recreativo de la playa comienzan a consolidarse aunque todavía no eran muy frecuentes entre los veraneantes los baños de mar. Se instalan al lado de la rambla, comercios, cafés y agencias de diarios de Buenos Aires.
Para 1911 la rambla de madera ya no estaba a la altura de esos tiempos por lo que bajo el gobierno de José Arias, se proyectó una rambla de mampostería. Desde 1912, año de la construcción de la Rambla Bristol -estilo francés Luis XV-, la costa marplatense podía proporcionar idéntico disfrute del veraneo sin la necesidad de viajar a Europa, que por esos tiempos atravesaba distintos conflictos políticos y sociales.
Es así que muchas de esas familias decidieron construir imponentes villas y suntuosas residencias a las que se trasladaban con un nutrido personal doméstico. La construcción se hacía sin reservas económicas; los materiales (carpinterías, vitreaux, mármoles, tejas) de los templos y mansiones eran traídos de Europa, especialmente, Italia y Francia.
Posteriormente, en 1936, se construye el complejo Rambla Casino-Hotel Provincial, lo que da lugar a la fisonomía definitiva que hasta hoy en día se mantiene en ese lugar.