El monumento natural Laguna de los Pozuelos es un área natural protegida de Argentina, que se ubica en el norte de la provincia de Jujuy en abarcando parte de los departamentos Rinconada, Yavi y Santa Catalina. Tiene 16 224 hectáreas y pertenece a la ecorregión de la Puna.
Se encuentra entre las localidades de Rinconada, Lagunillas, Yoscaba, Cieneguillas y Pozuelos. Protege la laguna de los Pozuelos junto a su avifauna acuática, compuesta por especies exclusivas del ambiente de la Puna.
Por su relevancia como hábitat para numerosas aves acuáticas en 1990 fue incluida en la lista de humedales de importancia internacional como primera reserva de biosfera de Argentina.
El 4 de mayo de 1992 se la incluyó en la lista de Humedales de Importancia Internacional o Sitio Ramsar.
Fue designado como Sitio de Importancia Internacional de la Red Hemisférica de Reservas de Aves Playeras (RHRAP) en mayo de 2014.
Para la legislación argentina un monumento natural es un área, cosa, especies vivas de animales o plantas, de interés estético, valor histórico o científico, a los cuales se les acuerda protección absoluta.
El monumento natural se encuentra en un extenso altiplano entre los 3400 a 3800 msnm.
Estas planicies o bolsones, separadas por cordones montañosos paralelos de norte a sur, carecen de escurrimiento al mar.
Así, el agua de las escasas lluvias o nevadas, se acumula en las depresiones centrales del bolsón, formando lagunas
extensas y poco profundas. Tal es el caso de la laguna de los Pozuelos. Tiene 25 km de largo y 9 km de ancho.
La extrema aridez del ambiente y los suelos pobres condicionan el desarrollo del bioma.
Por ello ciertas especies presentan adaptaciones particulares a estos ambientes, convirtiéndose así en propias de una región.
No es casual, que en la Puna se hallen numerosas especies endémicas, diferentes a las presentes en otras regiones del país.
Monumento Natural Laguna De Los Pozuelos
Por Karina Jozami
Este Monumento Natural, creado en 1981, se ubica en la región puneña del norte de la provincia de Jujuy, entre las localidades de Rinconada, Lagunillas, Yoscaba, Cieneguillas y Pozuelos.
En el corazón de una gran cuenca de drenaje cerrada, esta laguna permanente pero de salinidad fluctuante, sufrió una retracción entre los años 1990 y 1995, alcanzando una superficie de 100 hectáreas en los períodos más secos. En esta estación, quedan al descubierto grandes áreas cenagosas y una rica pradera junto a la laguna, que es usada por los lugareños para pastoreo, en su mayoría de ovejas y llamas, especialmente en el invierno austral.
Circundada por cordones montañosos, la laguna en sí misma no posee abundante vegetación acuática. El humedal está rodeado por una estepa semiárida con matorrales. Su principal riqueza es la variedad de aves acuáticas: 44 especies que fundamentan la nominación de monumento natural.
Sin lugar a dudas, los más sobresalientes son los gráciles flamencos; sus lánguidas figuras rosadas contrastan con los terracotas del altiplano. Aves acuáticas de gran tamaño, anidan en colonias, cercanas a las partes bajas de los lagos y lagunas, donde construyen nidos de barro en forma de cono truncado, en los que depositan uno o excepcionalmente dos huevos.
Los polluelos nacen con el pico recto y toman la forma corva a medida que van creciendo. También cambian las plumas, que son plumones blancos en los pequeños, mudándose a castañas y luego, cuando llegan a la madurez, se convierten en rosadas, variando su tonalidad según la especie y la alimentación.
Consumen minúsculas algas e invertebrados, que retienen luego de filtrar el agua en el pico, provisto en su interior de laminillas especiales.
En Laguna de los Pozuelos, la población de flamencos asciende a 25.000 ejemplares, conviviendo tres especies: el flamenco austral, la parina grande y la parina chica, estas últimas nativas de la Puna. Como sus dietas son diferentes no compiten entre sí por los recursos alimenticios.
Los patos maiceros, el barcino y el puna, se concentran en la desembocadura del río Cincel. Autóctono de la región, con capucho oscuro y pico celeste azulado, el puna nidifica en el pasto alto. Si bien el maicero, el barcino, el colorado y el juar-jual poseen grupos endémicos en la región, habitan en otros ambientes además de la Puna.
Las gallaretas, aves acuáticas que se alimentan de vegetales flotantes, pequeños invertebrados y algunos peces, se presentan en tres especies: la andina, la cornuda y la gigante. Los nidos hechos de juncos y otras plantas acuáticas, se distinguen por sus escudetes frontales de distintas formas y colores.
Los chorlitos, pequeñas aves con el pico y las patas largas, consumen insectos,
larvas y vegetales. Algunos ejemplares poseen nido en el hemisferio norte y migran todos los años a la Argentina; otros anidan en la Patagonia y migran a la región norte del país.
Grandes bandadas llegan a la zona, escapando del invierno de los ambientes árticos. No obstante, hay varias especies propias de nuestro territorio, como el chorlito serrano y el de vincha, que prefiere las orillas inundables, el bullicioso tero serrano y la avoceta andina, que se caracteriza por su largo pico, muy fino y curvado hacia arriba, adaptado para capturar pequeños invertebrados.
Los problemas de conservación que se presentan en esta área protegida residen principalmente en la erosión por sobrepastoreo, la extracción de huevos de aves de las colonias nidificantes y la contaminación del río Cincel como resultado de actividad minera fuera del Monumento Natural.
En este extenso humedal, las aves acuáticas encuentran un rincón privilegiado para anidar y crecer.
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