Proyectada en 1928 por el arquitecto Antón Gutiérrez y Urquijo, fue construida por la empresa Arturo Lemmi y Hermanos, de amplia trayectoria en la ciudad. Alvear y Falucho, Mar del Plata.
Su propietario original, Fernando Pérès, fue un productor de algodón y fabricante de telas que desarrollo su actividad durante los primeros años del siglo XX.
De planta compacta con anexo de servicios, se desarrolla en dos niveles y entretecho, con una volumetría articulada a través de entrantes y salientes.
En planta baja se destaca el volumen que tiene el porch de acceso y adosada a éste, una galería semicubierta con remate curvo en la esquina, sostenida por gruesas columnas de madera torneada.
La obra se encuadra en la corriente estilística normanda del pintoresquismo, evidenciada en sus bay windows, las soluciones en las colas de pato de las cubiertas y las grandes superficies en falso pan de bois, en las que se advierte calada en madera la imagen del caballito de mar, sello característico del autor.
El sello del arquitecto me encanta, el caballito de mar es único y el que más me gusta lo descubrí en la puerta de entrada.
Esta declarada de interés patrimonial.
Fuente: Alejandra Domínguez
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