top of page
Foto del escritorDaniel Speranza

Banco de la Nación Argentina (casa central)

La Casa Central del Banco de la Nación Argentina es uno de los edificios más emblemáticos que rodean la Plaza de Mayo, sitio fundacional de Buenos Aires y sede de grandes acontecimientos de la historia del país.

Diseñada por el prestigioso arquitecto Alejandro Bustillo con una combinación de estilos clásicos en clave monumentalista, la casa central ocupa una manzana entera con 10.000 metros cuadrados y fue inaugurada en 1944. El mismo fue declarado patrimonio histórico.

La Casa Central del Banco Nación es una de las obras de arquitectura más imponentes de la Argentina, tanto por los su volumen edilicio y los nobles materiales empleados como por diversos elementos de su diseño, entre los cuales se destaca especialmente su gigantesca cúpula de 50 metros de diámetro, juzgada por Bustillo como probablemente la más grande de Sudamérica.


Realizada con nervios de hormigón armado y completamente vidriada para proveer de luz al gran espacio central de cuádruple altura que domina el edificio, posee un original sistema de apoyo que no descarga directamente sobre los muros laterales, sino que posee una serie de rieles con ruedas que le permite deslizarse libremente cuando dilata y comprime, cargando sobre cuatro columnas su peso de 50.000 toneladas.

Todas las fachadas del edificio fueron revestidas con cuarcita extraída de Balcarce y Chapadmalal, mientras los interiores están revestidos con diferentes mármoles.


En cuanto al estilo del edificio, se puede juzgar en rasgos generales como monumentalista, representado por sus dimensiones inusuales, como las cuatro

columnas que marcan el acceso principal y recorren los tres niveles completos de la fachada, o el espacio central de múltiple altura, de proporciones imponentes.

En él, Bustillo combinó todos los avances tecnológicos con un diseño tradicional, la arquitectura neoclásica de moda durante la década de 1930, sumando a la vez una clara influencia de la tradición arquitectónica francesa, que ponía al edificio en sintonía con el resto de la Buenos Aires de entonces.


Un inmenso pórtico con columnas corintias

domina la entrada principal sobre la ochava de Rivadavia y 25 de Mayo. Bustillo se encontraba en la búsqueda de un estilo que nacional basado en las formas clásicas y en las proporciones académicas.

En esta fachada maciza y compacta que toma los cuatro frentes del edificio, la única irregularidad es la ochava en Rivadavia y 25 de Mayo, en donde se eligió mantener el corte a 45° que existía en el anterior edificio de la Bolsa de Comercio, aprovechándolo para implantar allí el acceso principal, mirando a la Casa Rosada.


Esa resolución de la ochava tan particular, hacía un juego de simetría con la esquina opuesta, la de Balcarce e Yrigoyen, del otro lado de la Plaza de Mayo, en donde existió entre 1854 y 1942 el primer edificio del Congreso Nacional.

Al mismo tiempo, el antiguo edificio del Banco Hipotecario de estilo clasicismo despojado (actualmente ocupado por la AFIP), también fue pensado para mostrar la misma ochava en espejo con la sede del Banco Nación, pero los planes fueron cambiados sobre la marcha, cuando la construcción ya se estaba llevado a cabo, muy a pesar de que esas modificaciones no afectarían solo a un edificio sino que arruinarían un proyecto mayor.


Y esa es la razón por la cual al oeste de su pórtico presenta tres pares de columnas, mientras que al este de su pórtico, presenta seis pares de columnas.


Esto se debe a que, ya con la entrada construida, hubo que duplicar la cantidad de columnas del lado este para completar los metros tomados de la ochava que no se construyó. Claramente, si desde un principio el plan hubiera sido no realizar dicha ochava, su pórtico de ingreso se habría construido centrado. Curiosamente, desde arriba es posible ver que la ochava fue construida, aunque luego se dejó como un patio interno.

Para los interiores del Banco Nación, el tono es claramente más moderno y despojado de ornamentos, siendo dable destacar los revestimientos en piedras y mármoles pulidos, un rasgo que el Banco Nación comparte con un edificio anterior de Bustillo, el Museo Nacional de Bellas Artes (1933).

8 visualizaciones0 comentarios

Entradas Recientes

Ver todo

Комментарии


bottom of page